El dolor es un síntoma, una señal de aviso de nuestro cuerpo que nos ayuda a detectar que hay un problema o una lesión.
Para aquellas personas que sufren de dolor crónico, proponemos una serie de recomendaciones:
1.Sigue fielmente las indicaciones y pautas de tu médico.
2. Afronta activamente tu problema: pide información a especialistas sobre tu dolor, por qué te duele y qué lo mantiene.
3. Expresa e informa de tu dolor a tu entorno para que te entiendan pero elimina la queja constante y no centres tus conversaciones solo en el dolor.
4. Recupera progresivamente tus actividades diarias, laborales, sociales y de ocio, aunque te cueste. Notarás una gran mejoría.
5. Andar, moverte o hacer deporte (si tu médico lo aconseja), es un gran “antídoto” contra el dolor.
6. Aprende a reducir las emociones negativas, hará que disminuya la percepción de dolor.
7. Aprende técnicas de relajación para contrarrestar la tensión que él provoca.
8. Adapta tu vida: piensa en todo lo que sí puedes hacer a pesar de tener dolor, seguro que es mucho.
9. Si no puedes tú sólo, busca ayuda psicológica. La terapia psicológica cuenta con técnicas eficaces y contribuye a aumentar la efectividad de los tratamientos médicos.
Que el dolor no controle tu vida, aprende a controlarlo a él!
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