El grupo de los antidepresivos Inhibidores Selectivos de la Recaptación de la Serotonina (ISRS) Está formado por seis fármacos:
- Fluoxetina: Prozac, Adofen, Reneuron.
- Paroxetina: Motivan, Frosinor, Seroxat.
- Sertralina: Aremis, Besitran.
- Fluvoxamina: Dumirox.
- Citalopram: Relapaz, Prisdal.
- Escitalopram: Cipralex, Esertia.
Los efectos secundarios de los ISRS aparecen desde el primer momento de su administración y empiezan a tolerarse mejor pasadas dos o tres semanas.
- Aumento de la ansiedad: puede producirse agitación o vulnerabilidad al pánico con las primeras tomas o cuando se está retirando el fármaco.
- Disfunción sexual, descenso de la libido y retraso del orgasmo y la eyaculación: este es un efecto secundario muy frecuente y molesto, que se debe a que, en los mecanismos de la excitación sexual, para activar la reacción parasimpática que requiere una erección, es necesario que la médula espinal perciba un cese de la liberación de serotonina por parte del núcleo paragigantocelular del tronco encefálico; y al estar inhibida la recaptación de la serotonina por el consumo de ISRS, se dificulta la erección.
- Alteraciones leves del movimiento: distonías, acatisia, leves temblores parkinsonianos.
- Alteraciones del sueño: despertares nocturnos, mioclonos nocturno.
- Náuseas y/o vómitos, diarreas, molestias gastrointestinales.
Cuando estos efectos son graves (en raras ocasiones) reciben el nombre de Síndrome Serotoninérgico. En general, los efectos secundarios de los ISRS son molestos, pero no peligrosos.
Los ISRS son mucho menos tóxicos que otros antidepresivos comercializados anteriormente, de manera que el riesgo de intentos autolíticos o intoxicaciones por sobredosificación es mucho menor.
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